Pintura y poesía

Pintura y poesía

sábado, 6 de agosto de 2016

Antonio Machado. A un olmo seco.

El olmo seco (1987)
Agustín Redondela (España, 1922 - 2015)
Óleo sobre lienzo
Chillarón, Guadalajara, España.

  Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido.

  ¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.

  No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.

  Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.

  Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas en alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas, 
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.

Antonio Machado (España, 1875 – 1939)

2 comentarios:

  1. Mi poema preferido.... Inolvidable.
    Gracias, Gina

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  2. Gracias a ti, Miguel, por tu visita y aliento permanente.
    Un abrazo,
    Gina

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